El pensamiento intuitivo surge de las teorías del famoso psicólogo suizo Jean Piaget, quien dedicó su trabajo de investigación a demostrar cómo se desarrolla la inteligencia humana desde la infancia, una etapa que para este pensador era trascendental.

Piajet planteó que el proceso de aprendizaje se da a través del juego y de forma experimental, es decir a través de su contacto con el entorno para poder, con el desarrollo, adquirir conocimientos, generarlos y construirlos.

En este etapa de aprendizaje un niño cuando ya habla pasa por varios estados, en los que es capaz de sustituir el objeto por su representación simbólica y ya al hablar puede hacer esa separación de las realidades físicas, de lo que ve, observa de las mentales, es decir que va formando conocimiento y desarrollando su inteligencia.

Y aunque el niño tiene una capacidad limitada puede hacer diferencias para entender que existen otras formas de ver las cosas, más allá de cómo él las piensa. Esto lo logra a través de la práctica de diversas actividades, sus experiencias con el medio donde se desenvuelve y el juego.

Este pensamiento tiene varias etapas, en las que el niño aún tiene una forma de pensar muy subjetiva, egocéntrica, en la que su pensamiento intuye pero no es capaz de demostrar porque sus intuiciones son primarias, muy rígidas e irreversibles. Se caracteriza por:

  • Ausencia de equilibrio: Que no le permite relacionar y coordinar informaciones. Es la falta de equilibrio entre la acomodación y la asimilación.
  • Centración: Definida como la capacidad del niño para conectar una disposición de objetos con otra, para verificar el cambio entre tales disposiciones. Aún no domina con rapidez representaciones mentales para entender los cambios.
  • Irreversibilidad: No es capaz de realizar la misma acción en los dos sentidos del recorrido aunque sea una misma acción ni la operación de reciprocidad.
  • Realismo, artificialismo, animismo: El realismo absoluto en el que para el niño sólo parecen existir las cosas, y explican lo que ocurren en el mundo a través del artificialismo y el animismo se define porque dan valor y características de vida a los objetos.
  • Egocentrismo: No es capaz de distinguir entre la realidad y la fantasía, por lo que el niño habla de sí mismo, tiene una naturaleza subjetiva en la que se afecta la visión del mundo porque es solo la que ve o entiende el niño. Y no tiene noción de que hay otros puntos de vista.
  • Inteligencia preoperatoria-pensamiento preooperacional: El  niño entiende especialmente un solo aspecto relevante de un hecho, pero descuida otros aspectos importantes.
  • La yuxtaposición, es decir el encadenamiento de juicios, opiniones y explicaciones sin relación entre sí. Aplica el sincretismo no le permite distinguir las relaciones causales, ni analogías porque no tiene la lógica de ellas. Sigue siendo muy subjetivo y vive como en un mundo mágico donde los objetos tienen vida.

Las teorías de Piaget

Jean Piaget elaboró La teoría del desarrollo cognitivo que explicó el desarrollo de la inteligencia humana. Elaboró y distinguió una serie de estados para definir la evolución de la inteligencia, y dio un valor importante a lo que ocurre en la infancia.

Para el suizo, la realidad “es un sistema dinámico en continuo cambio” y por ello existen sistemas dinámicos que necesitan de transformaciones y etapas, que utilizó para caracterizar el desarrollo de la inteligencia en los niños.

pensamiento intuitivo

Al dedicarse al campo de la educación Piaget analizó dos procesos:

  • Asimilación: manera en que los seres humanos perciben y se adaptan a la nueva información
  • Acomodación, proceso con el que toma nueva información del entorno para elaborar nuevo conocimiento.

Según Piaget estos dos conceptos eran interdependientes, no podía darse asimilación sin acomodación o viceversa.

En líneas generales este psicólogo dijo que los niños recorren  etapas específicas durante su desarrollo y que estas fases se producen en un orden fijo en todos los niños.

El pensamiento simbólico

Transcurre entre los 2 y 4 años, cuando los niños aún no pueden cambiar de forma lógica la información que reciben, pero sí pueden pensar en imágenes y símbolos. Por ello es fundamental en este momento el juego, ya que permite desarrollar habilidades e incluso los niños se crean amigos imaginarios.

 El pensamiento pre-conceptual

También conocido como pre-operacional se ubica entre los 2-7 años,cuando el niño descubre que unas cosas pueden tomar el valor de otras, ya puede interiorizar, va desarrollando el habla, imita, es capaz del juego simbólico y en este etapa su pensamiento lógico es inflexible.