Conoce los juegos educativos por edades
Al elegir un juego es crucial considerar la edad del niño para el cual está destinado. Un juguete para un grupo de mayor edad, podría hacer que el niño se sienta incómodo y, en el caso contrario, podría resultar demasiado simple para jugar y el pequeño se podría aburrir. Deben seguirse las recomendaciones sobre la edad en las instrucciones del juguete para evitar estas situaciones. La elección del juguete también debe estar orientada a apoyar positivamente el desarrollo del niño, entendido desde los más variados puntos de vista: desde la maduración psicofísica, hasta la cognitiva, además de la emocional y social. Diversión e invitación: estos juegos despertarán la curiosidad de los niños guiándolos hacia continuos descubrimientos.
Juegos de cero a dos años
Los niños más pequeños son curiosos y poseen el deseo irrefrenable de descubrir el entorno. Los bebés necesitan juegos funcionales que les permitan manipular objetos. Desde el nacimiento hasta los cuatro meses el bebé no juega, sino que reacciona por reflejo, hasta que aprende a repetir movimientos a su gusto. Alrededor de su primer año, el bebé ya interactúa con los juegos para lograr un fin determinado. Hacia el año de edad, gana pericia con el manejo de los juguetes y experimenta nuevos movimientos.
Hacia los dos años, el niño reflexiona antes de accionar el juguete, pues conoce los efectos de sus acciones con él. Cuando alcanzan los dos años, los niños ya poseen cierto vocabulario y, como ganaron habilidades motrices, comienzan a explorar su entorno y a imitar a los adultos. Los juegos para niños de 2 años de edad son importantes desde un punto de vista pedagógico. Al estimular el desarrollo, el juguete guiará a los pequeños en sus experiencias y fomentará su creatividad e imaginación.
Juegos para niños mayores de dos años
En el rango de edad entre los dos y los seis años, los niños comienzan a emplear el pensamiento simbólico e introducen en su catálogo de juegos los juegos de imitación de objetos, situaciones y personas de la vida real. Los juegos de manualidades sirven para desatar la creatividad que atesoran. Se trata de juegos como la pasta moldeable Smuzy, o los puzles, además de todos los que incorporan bloques de construcción.
Los juegos imaginativos se aprovechan de que los niños ya entienden los símbolos e ideas que representan objetos. Se trata de juegos que utilizan marionetas o muñecos, o en los cuales los pequeños imitan o fingen que son alguien o algo. El beneficio de potenciar la capacidad de evocación se evidencia en la vida del niño cuando es capaz de inventar por sí mismo diferentes soluciones a un mismo problema.
